Morus alba L.

La familia de las Moraceae comprende especies laticíferas, generalmente leñosas, distribuidas sobre todo por los países tropicales. Las Moraceae están dominadas por árboles y arbustos con hojas alternas y estípulas concrescentes. Las flores son unisexuales, sobre plantas dioicas, actinomorfas, haploclamídeas, con perigonio simple y sepaloide, con tépalos y estambres en número variable, y el gineceo constituido por 2 carpelos soldados en un ovario unilocular, raramente bilocular, y por norma general súpero. La familia está convencionalmente dividida en 2 secciones: Moroideae, a la que pertenece el género Morus, con inflorescencias masculinas y femeninas en amentos. Los tépalos del perigonio en la madurez se vuelven carnosos y participan en la formación de una particular inflorescencia, la mora, cuyo verdadero fruto son las núculas, que están envueltas por el perianto carnoso; Arctocarpeae, a la que pertenece el género más rico, Ficus, con 700 especies, presentes incluso en nuestra flora con la higuera, Ficus carica. Característica fundamental de este grupo es su particular inflorescencia, el sicono, de forma esférica o piriforme, con las flores colocadas en la cavidad interna, después de la fecundación el sicono se transforma en una infrutescencia con los verdaderos frutos (pequeñas núculas) en el interior. La polinización es entomógama.

Las Moraceae presentes en Italia son pocas, sino de antigua introducción. En particular de una cierta importancia económica por sus frutos comestibles y por el uso de las hojas en sericultura son las dos especies de Morus, la morera, Morus alba, y la morera negra, Morus nigra, ampliamente cultivadas en todo el país. La higuera, Ficus carica, es la única especie que, al menos en Sicilia y en el sur de Italia, se encuentra también de forma natural, sobre todo en rocas, muros o en la vegetación riparia, y que, por tanto, podría ser indígena. Otras especies son cultivadas con fines ornamentales, como Maclura pomifera, Ficus elastica, F. microcarpa, etc. Entre las especies exóticas de interés económico están la venezolana Brosimum galactodendron, cuyo látex se utiliza en la alimentación humana; Castilloa elastica y Ficus laticifera, cuyo látex se usa en la producción de distintos tipos de goma; y Broussonetia papyrifera, originaria de Asia oriental, cultivada para sacar celulosa de la madera, y naturalizada en algunas partes de Italia, en ambientes ruderales.